La preparación más clásica de la Tarta Tatin lleva manzanas. Pero hace poco la probamos con membrillos y es una opción excelente en estos meses del año, cuando hay membrillos frescos en abundancia.
(Si se quiere hacer la tarta tatin clásica, reemplazar los membrillos por manzanas verdes y realizar el resto de la preparación igual.)
Ingredientes para la masa:
1. Harina 0000, 1 taza grande.
2. Manteca bien fría, 1/2 pan.
3. Azúcar, una cucharada colmada.
3. Vinagre de vino o sidra, 1 cucharada.
4. Sal, una pizca.
5. Agua bien fría, 3 o 4 cucharadas
Ingredientes para el relleno:
1. Membrillos frescos, pelados y frotados con limón, 3 grandes o 4 chicos. Pueden reemplazarse por peras o menazanas verdes.
2. Azúcar, 1 taza.
3. Manteca, 3 cucharadas.
4. Canela, una cucharadita.
Preparación:
– En un bol, mezclar la harina, sal y azúcar. Agregar la manteca bien fría y cortada en cubos. Con la punta de los dedos o dos cuchillos, deshacer la harina hasta que quede un granulado grueso.
– Agregar el vinagre y el agua fría de a poco y unir sólo lo suficiente para formar un bollo. Aplastar formando un disco, cubrir con papel film y llevar a la heladera.
– (La masa puede hacerse en la procesadora. Granular la manteca fría con uno o dos pulsos, agregar el agua y pulsar. No trabajar demasiado o la manteca se derretirá y la masa quedará dura al cocinarse).
– En un molde para tortas no desarmable, colocar la taza de azúcar y mojar con agua hasta cubrir. Colocar sobre la hornalla a fuego medio, revolver de vez en cuando hasta que se forme un caramelo color tostado. No dejar quemar.
– Sacar inmediatamente del fuego, agregar la manteca de golpe y la canela. Revolver hasta integrar la manteca. Dejar enfriar sobre una superficie fría o en una asadera con agua fría hasta que el caramelo esté duro.
– Pelar los membrillos (o manzanas), quitarles las semillas, cortar en cuartos y cubrir con ellos (bien apretados) el fondo acaramelado del molde para tortas.
– Sacar la masa de la heladera, estirar fina con palote. Envolver en el palote enharinado y desenrrollarla sobre el molde. Pasar el mismo palote sobre los bordes del molde, así se corta solo el sobrante. Remeter los bordes de la masa entre los membrillos y el borde, cn la ayuda de un cuchillo o espátula flexibles.
– Cocinar a horno moderado entre 40 y 50 minutos, o hasta que la masa esté dorada y el caramelo burbujee.
– Retirar del horno y, en caliente y con mucho cuidado, desmoldar en una fuente redonda. Si algún trozo de membrillo queda adherido al fondo, despegarlo con una espátula y ubicarlo sobre la torta.
– Servir tibia o fría, con crema chantilly, helado de vainilla o queso mascarpone.