Una receta de la Patagonia.
Ingredientes:
– Un pollo, cortado en ocho presas.
– Una cebolla grande.
– Tres dientes de ajo.
– Una taza de hongos de pino, secos.
– Una taza de vino tinto.
– Una taza de caldo de verduras.
– Crema, un pote.
– Sal y pimienta.
– Aceite de oliva, un pocillo.
– Romero fresco, una ramita. (Puede ser también tomillo).
Preparación:
– Despresar el pollo o pedirlo cortado en ocho al carnicero. Descartar las puntitas de las alas y sacar la piel a todas las presas. Salpimentar.
– Poner a hidratar los hongos en el vino tinto.
– Dorar las presas en el aceite de oliva bien caliente, por todos lados. Dorar las presas de a tres o cuatro por vez y reservar en un plato hondo.
– Picar bien finos la cebolla y el ajo.
– En la misma olla o sartén donde se selló el pollo, agregar dos cucharadas de aceite de oliva y rehogar la cebolla y el ajo. Salpimentar. Rehogar hasta que la cebolla esté transparente.
– Agregar los hongos (sín líquido) y rehogar medio minuto.
– Agregar el vino tinto en donde se hidrataron los hongos y el caldo. Agregar las presas de pollo. El líquido tiene que cubrir apenas el pollo, si faltara completar con caldo o agua. Salpimentar generosamente. Agregar el romero.
– Dejar cocinar a fuego medio hasta que el pollo esté bien hecho, más o menos cuarenta minutos.
– Agregar la crema, revolver y dejar cocinar a fuego bajo diez minutos más.
– Si faltara espesar a la salsa, agregar dos cucharaditas de almidón de maíz disueltas en un cucharón del líquido de cocción y revolver bien.
– Servir con papas al horno a las hierbas.